Miércoles, 10:30 AM. Un aroma a “channel namber fai” circula por el aire… Ella camina apurada como mejor puede caminarse con zapatos finos de taco aguja de 15 cm. y un trajecito escotadísimo que hace rato estaba guardadito para este tipo de ocasión.
-Lastimosamente no contaba con este “calorcito”, de 40ºC a la sombra que me derrite los aretes!! – piensa ella, al mismo tiempo que se da cuenta que puede sacar partido de la situación con esa gotita de sudor rodando hacia abajo… Mientras sigue apuradísima, carpetita en mano, a una entrevista laboral.
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Quien no habrá tenido un altercado, o en el mejor de los casos, alguna cruzadita de palabras cariñosas con esta raza aparte que son las secretarias (sin ofender a varias amigas de ese sector laboral.
O tal vez haber llamado por teléfono a alguna empresa y una complaciente voz te responde –Despacho del Sr. Clementino de los Campos Silvestres, Dulce Ángel al habla para servirle…- y al preguntarle algo, sea lo que sea, por ejemplo “que hora es?” te responde –Un momento por favor…– y te meten esa musiquita instrumental horrible creada por el mismísimo demonio, que además de perforarte los tímpanos pisotea tu paciencia y te deja esperando dos horas y media, para luego derivarte a otra sección… DULCE ÁNGEL MIS POLAINAS!!!!.
Aunque también se cuenta a algunos secretarios mezclados entre el grupo de asistentes.
Ocupémonos de las féminas en esta ocasión, e intentemos hacer un pequeño bestiario, digo listado de los tipos de secretarias que pudiesen existir:
- Secretaria de Institución educativa: es como una mutación casi genética (porque maestro se nace) obtenida de años de magisterio + puesto de secretaria libre. Esta amalgama de persona, se sabe desde los nombres y apellidos de los de pre-escolar (con sus correspondientes padres), hasta el sueldo más ínfimo de la limpiadora mas nueva del lugar y no es por criticar. Es simplemente asombroso que alguien conozca hasta las costumbres fisiológicas de la señora Directora.
- Secretaria o asistente de construcción: A diferencia de sus jefes que están todo el dia por el campo, sudorosos y polvorientos, esta niña seduce a todo el personal con su pulcritud de pies a cabeza. Pero ojo! Esa es solo la superficie! En realidad ya se le pegó todo el vocabulario de los muchachos que le rodean, convirtiéndose en una más. Y es que no le queda otra.
- Secretaria-jefe: Y que conste que hablo (o escribo) con propiedad. Ya me tocó lidiar con este estereotipo de mujer!! Y todas las veces se pierde la batalla. Habla por teléfono, manda, escribe, corrige, ordena, desordena y a veces le sale el lado humano y actúa de psicóloga laboral, de esas que te escucha todos tus problemitas y tiene algún tecito para cada dolencia.
- Secretaria Jurídica: Viste pulcramente con un trajecito que ya lo tiene encarnado, y trata de “Doctor” a cualquier “güey corneta” que pase por ahí y tenga una corbatita. Maneja todo el vocabulario jurídico y cita a la Constitución Nacional hasta para comprar empanadas en la esquina. Posee un terrible complejo de jueza de la Suprema Corte y anda a las corridas todo el día por los pasillos del Tribunal haciendo pasear las carpetas de todos los casos judiciales habidos y por haber… Quizás esa sea la causa por que Tacumbú esté lleno de presos sin condena…
Bueno, por hoy nos quedamos solo con estas cuatro pero que ejemplifican bastante este submundo del “secretarismo”… Si sos secretaria y te enojaste fue porque te identificaste con alguna de ellas y perteneces al lado oscuro de la labor asistencial… Y si te surgió una sonrisita fue porque seguís siendo parte de ese maligno pero necesario sector, y que tenés ganas de cambiar, pero que de seguro no lo vas a hacer, para seguir siendo musa inspiradora de tantos plagueos, críticas y fantasías de cualquier mortal que se haya atravesado por tu escritorio.
Pero para bien o para mal, las secres hacen y deshacen nuestro dia laboral. Qué sería de nosotros sin esa “mirada reprochona” que nos tiran a cada momento o sin el cafecito con demasiada azúcar del que podemos ser víctimas en alguna ocasión. Que seria de nosotros sin ese tono cantadito al teléfono…holaaaa buen diaaaa!! que nos tiran cada vez que les hacemos una llamadita?!!?
Pero que bien estaríamos si careciéramos de ciertos especímenes… O no...?